En todo siniestro, existen dos implicados, un causante y un perjudicado. En el caso de siniestros de automóviles, los daños del perjudicado son atendidos por su Compañía aseguradora, pasando ésta posteriormente un módulo a la del causante (convenios CIDE, ASCIDE, etc.).
Si Ud. es el perjudicado, en la mayoría de los casos no debe tener problemas para reparar sus daños ¿pero qué sucede cuando Ud. es el causante?, solo tiene 2 opciones:
Si tiene la garantía de daños propios (todo riesgo) no hay problema, da un parte a su Compañía y asunto solucionado.
Cuando no dispone de la garantía de daños propios es cuando empiezan sus problemas, tiene que dejar su coche en un taller y fiarse de la buena fe y la profesionalidad del taller para que la factura de reparación sea la acorde con los daños que tiene.
EN ESTE PUNTO ES DONDE PERIREP PUEDE AYUDARLE
Al igual que las grandes compañías confían en profesionales como nosotros para velar por sus intereses Ud. también puede hacerlo, contratando nuestros servicios. Asegúrese de que los tiempos empleados en la reparación son los correctos, que todos los materiales sustituidos lo sean por ser estrictamente necesario, en resumen, que un pequeño descuido al volante tenga el coste que debe tener.
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